Un comunicante, que prefiere preservar su identidad, pero que se manifiesta seguidor de este blog, en la entrada “DON BAMBAS EN ACCIÓN”, sugiere que a DON BAMBAS se le maneja, a distancia, con hilos, como a una marioneta de feria. Puede que sea cierto, pero no creo que sea menos cierto que, desde esa posición sumisa, propia de un polichinela de feria, algo debe de latir en su interior, pues la nariz no deja de crecerle, como si algo estuviese fraguándose en su interior, para dejar esa posición y tomar la de macho alfa, que tanto desea.No parece que con semejante apéndice nasal, DON BAMBAS sea capaz de oler una rosa, sin pretensión de fagocitarla a la primera de cambio, en cuanto las circunstancias sean propicias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario